Cuando nada te sale bien

Post a modo de  desahogo :(

A principio de año me había planteado algunas metas y lo cierto es que no he podido cumplir ninguna porque todo ha salido mal hasta ahora. 

Sin trabajo 

Empecé sin trabajo porque me despidieron, así que pensé en buscar un trabajo de medio tiempo o de no tantas horas para poder equilibrarlo con mis cosas artísticas. Por desgracia no encontré tantas ofertas de ese tipo, pero me tranquilizó el hecho de saber que aún era principio de año y había tiempo para hallar un trabajo a mi medida. Pasaron un par de meses, envié varios curriculums a ofertas que me interesaban pero no me llamaron de ninguna. Después como pasaron otro par de meses, empecé a considerar cualquier vacante según lo que pudiera realizar, así que postulé a muchas cosas. Finalmente me llamaron de dos lugares para entrevista, pero no quedé seleccionada :( Eran puestos de reemplazo y aún así, no quedé. Pero seguiré buscando, a ver si sale algo antes de fin de año. Vivir sin ingresos es muy complicado. 

La otra opción

Como no encontré trabajo de la forma tradicional, intenté ser ilustradora freelance. Seguí videos en youtube que señalaban los pasos sobre cómo vender ilustraciones por internet y obtener comisiones. Me uní en diversos grupos que recomendaban, publiqué mis servicios, hice una tabla de precios y redacté las condiciones de dicho servicio. También probé suerte con Fiverr, página donde ofreces tus servicios, pero los clientes son de ellos. ¿Qué conseguí? Estafas, tanto en Fiverr, facebook, instagram. No era que no llamara la atención, pero en su gran mayoría la gente que me contactaba eran estafadores, como tenía todo bien regulado y lleno de reglas ninguno de ellos lograba su propósito. Pero me sigue pareciendo triste que ahora exista tanto scammer queriendo aprovecharse de alguien que solo quiere ganar algo de dinero con sus dibujos. 

La residencia

En marzo me avisaron que había quedado seleccionada en una residencia artística local, estaba muy feliz. Si bien no era lo que se entiende por residencia en su totalidad (no implicaba alojarse a tiempo completo en un lugar) sí ofrecía un lugar donde poder ir a realizar trabajos artísticos y la participación en ferias ocasionales en un lugar del centro (todo esto por precio alcanzable, nada es gratis). Me entusiasmé porque tenía mis ahorros y aseguraba las ferias que se realizaban en el mismo espacio. En un principio, me gustó, el lugar en realidad es genial como espacio si quieres pintar. Empecé a pintar cosas de pequeño formato y me las arreglaba con los muebles que había en caso que tener que compartir sala (habían muy pocos muebles para dejar las cosas y normalmente tenía que entrar alguna de las mesitas del patio para acomodarme). Cada vez que dejaba mis pinturas en proceso a la semana siguiente aparecían con la pintura corrida, como si las hubieran movido sin ningún cuidado. Las primeras veces las arreglaba y todo bien, pero después de varias semanas ya me empezaba a cansar. A otra persona también le pasó lo mismo y se quejó con la organización. Yo opté por cambiar de sala en realidad porque el formato pequeño allí no se trabajaba cómodamente. Estuve un par de meses trabajando bien, me gustaba. Hasta que vinieron las lluvias y la austeridad, ir a trabajar allí significaba un viaje en micro y no es como que el pasaje esté muy barato y cada vez que llovía era complejo trasladarse, corría el riesgo de enfermar y al final prefería no ir. Mi último problema fue el tema de la organización: las ferias empezaban muy tarde, estaba acostumbrada a llegar temprano en ferias de antaño, instalarme con mis cosas y esperar a que llegara la gente. Aquí abrían después de las 16:00 hrs, porque primero debían compartir  y comer todos juntos hasta quedarte hasta tarde, también habían juntas de fin de mes que se suponía que eran para ver/intercambiar progresos, pero en lugar de eso se juntaban a compartir otros temas y cenaban o compartían comida. Fuera de eso también las ferias realizadas tenían una política o ideología detrás de lo que se hacía. No me molestaba, pero de alguna forma siempre pensé que eso no calzaba bien conmigo. Al final terminé sintiéndome un desastre y decidí dejarlo. Lamentablemente solo puedo pintar si los materiales y todo se encuentran cerca mío, al menos sirvió para invertir en nuevos materiales y sacar adelante una nueva idea. 

Eso, no planteo soluciones aún. 

Quizás el mes que viene lo piense mejor.